Localidad: Hacinas
La primera noticia sobre la existencia de herreros en Hacinas se halla en el catastro de 1753. Siempre fue un trabajo a tiempo parcial, pues el resto era para atender la labranza. Su lugar de trabajo era la fragua, donde tenían sus herramientas, que eran, entre otras:
- Atizador o espetón: que servía para atizar el fuego.
- El tajo o machuco: madera donde se coloca el yunque.
- El pujavante: se usaba para cortar las huellas de las caballerías y luego se colocaban las herraduras.
- El perol o bote: servía para enfriar las herramientas.
- La tajadera: cuchilla para cortar el hierro.
- El sacabocados o tenazas: se usaba para sostener los hierros.
- El fuelle.
Germán Gutiérrez, uno de los últimos herreros de Hacinas, describía así el trabajo en la fragua:
"Se comenzaba con la preparación del fuego en el fogón, el carbón empleado era el brezo y solíamos traerlo de Monasterio. Con el fuelle se avivaba el fuego, y cuando ya estaba a punto se calentaban los hierros y luego se marcaban las piezas, que se machacaban a fuego. Las rejas de los arados se machacaban entre dos: los amos y los herreros. Los amos daban con el martillo gordo y el herrero con el pequeño, para marcar. Cuando estaba arreglado se enfriaba en una pila de agua".